Biografía de Henry Fayol

Nació en la ciudad de Constantinopla (Estambul), en el seno de una familia de clase media de origen francés. Su padre fue ingeniero e integrante del ejército. Se habían asentado en un suburbio del Imperio Otomano porque se le encomendó la construcción de una obra.

Regresó a Francia con su familia e inició sus estudios en el Liceo de Lyon, y en el Ecole nationale supérieure des mines de Saint-Étienne.

Se recibió de ingeniero civil de minas y de inmediato comenzó a trabajar en la Sociedad Anónima de Commentry Fourchambault, una empresa insignia en los rubros minería y metalurgia.

1866

Fue ascendido a gerente de minas. Hizo una notable y ascendente carrera dentro de la empresa, hasta alcanzar la gerencia general, a sus 47 años, y ocupó dicha posición por tres décadas hasta que se jubiló y se retiró.

El fayolismo sostuvo que una organización debe sincronizar sus componentes y áreas para funcionar correctamente y ser eficiente. La falla o descoordinación en alguno de estos atenta contra la eficiencia.

Por otra parte, afirmó que, los trabajadores, son una pieza fundamental en el cumplimiento de las funciones.

Las funciones técnicas están asociadas a la producción de bienes y servicios; las comerciales están enfocadas en las acciones de compra, venta e intercambio, es decir, que los bienes circulen y sean consumidos; las financieras se orientan a la gestión del capital, en las que el administrador es la estrella y el encargado de controlar la economía con prudencia; las de seguridad suponen asegurar a la compañía y a sus empleados bienestar, higiene, etc.; las funciones contables se centran en llevar un correcto control de recursos y estar al tanto del estado financiero de las operaciones que se efectúan; y las administrativas regulan, integran y controlan las anteriores. Deben coordinar la gestión en su integralidad.

Mientras que los 14 principios que formuló se convirtieron en una especie de “decálogo empresarial”: división del trabajo, autoridad y responsabilidad, disciplina, unidad de mando, unidad de dirección, subordinación del interés individual al general, remuneración, jerarquía, centralización, orden, equidad, estabilidad, iniciativa y espíritu de cuerpo.

Los empleados deben recibir las órdenes de un solo superior para evitar cruces de directivas que confundan; es necesaria la capacidad de liderazgo para ganarse la autoridad; hay que desplegar un programa para cada actividad: un objetivo debe contar con su plan, procedimientos y un administrador; toda actividad debe ser gestionada por una sola persona; buscar el beneficio de la mayoría y eludir la satisfacción individual; respetar las reglas y los acuerdos de convivencia; delimitar y dividir las funciones aumenta la eficiencia; cada empleado debe ocupar el cargo adecuado a su perfil y habilidades; el organigrama jerárquico debe estar claramente definido; el salario debe coincidir con el esfuerzo realizado y los beneficios de la compañía compartidos por todos; las autoridades deben brindar un trato amistoso y decisiones justas a sus subalternos; ofrecer estabilidad laboral y evitar la rotación constante; dar rienda suelta y libertad para crear; y promover el trabajo en equipo afianza el vínculo laboral entre pares y con superiores.

Cabe destacarse que, durante su gestión como director de la compañía minera aplicó el mencionado esquema funcional y los principios y obtuvo excelentes resultados: permitió el trabajo en equipo, e introdujo innovaciones en la división de las tareas. El éxito conseguido a través de estas modificaciones le permitió a la empresa sumar otras minas.

Fue distinguido como caballero de la Legión de Honor francesa.

Publicó el libro Administration industrielle et générale, que sintetizó toda su producción teórica.

Se retiró de la gestión ejecutiva de la empresa, pero continuó como su director.

Falleció en la ciudad de París. Tenía 84 años.